Orizaba, Ver.- Ante la crisis que ha afectado al sector ganadero, de más de 250 productores de ganado que había en la región, ahora sólo quedan 84, pues esta actividad está dejando de ser costeable lamentó el presidente de la Asociación Ganadera Local de Orizaba Julio Palafox Lezama.
En entrevista expuso que los altos costos para mantener al ganado han hecho que está ya no sea una actividad redituable por lo que las familias ganaderas han optado por tomar otras actividades, haciendo que esta tradición se rompa pues, aunque antes cada ganadero tenia de 10 a 150 cabezas en la actualidad el promedio es de cinco a seis y en los mejores casos unas 15.
“En lugar de crecer, estamos menos productores, algunos por la edad han dejado la actividad y otros porque en realidad ya no es tan costeable tener el ganado a menos que tengan terrenos que puedan producir su propio forraje, porque de otra manera a cómo está la situación que es puro comprar y comprar, nos pone en una situación crítica”.
Agregó que algunos ganaderos están optando por otras especies como el borrego, las ovejas y los puercos, pues cada vez es más difícil mantener a las vacas y los toros. “Esta crítica la situación por eso muchos han dejado la actividad y han vendido sus ganados o han reducido el número, esto reduce el ganado lechero, ya empieza a haber el borrego, el ganado ovino y el porcino, pero en realidad en cuanto al lechero está crítica la situación”.
Expuso que si bien hace 10 años había alrededor de 270 productores, hace dos años eran 84 pero en la actualidad estos deben ser muchos menos, pues casi siempre son personas de edad adulta quienes siguen conservando esta actividad y en ya han fallecido algunos; “De 270 productores que éramos hace 10 años ahorita nada más quedamos 84, nada más imagínese cuánto ha reducido se puede decir que dos terceras partes y antes los establos eran de 100 a 150 animales, ahorita el que tiene 15 o 20 vientres es un productor de los altos, pero en realidad ahorita máximo tienen cinco o seis vaquitas, no más”.
Finalmente dijo que esta actividad se podría perder en la zona, pues las nuevas generaciones están apostando a carreras que les generen un ingreso para mantener a sus familias. “Los hijos de los productores que han fallecido no siguen esta actividad, llega el momento en que los hijos deciden dedicarse a lo que estudian y nos dicen esta actividad ya no me interesa, si quieres tu ganado véndelo delante y ahí se va perdiendo esta actividad”.